Choferes de la 501 reclamaron seguridad


Las unidades de las líneas de colectivo 501, 245 y 394 realizaron ayer un paro en reclamo de seguridad. Desde las 5 y hasta las 13, esos colectivos y los de la 165 y 51, que se solidarizaron con los choferes damnificados, no circularon unidades.

Los delegados gremiales de la empresa precisaron que hubo tres robos “muy violentos”, que motivaron la medida de fuerza. “Por la descripción que dieron los choferes parece que todos los ataques fueron realizados por las mismas personas, afirmaron delegados de la empresa. En tanto, desde la comisaría de Luis Guillón explicaron que el grupo está conformado por dos hombres mayores de edad, quienes aún "no están identificados".

Los hechos. Todo comenzó a las 5:05, cuando un grupo de ladrones se subió al interno 17, perteneciente al ramal 13 de la línea 501, que provenía del cementerio municipal de Esteban Echeverría y finaliza su recorrido en el cruce entre Camino de Cintura y Juan XXIII. Si bien los hombres sacaron boleto normalmente, en algún momento del recorrido se acercaron al chofer y, armados con un caño, le exigieron que detenga el vehículo. Le quitaron sus pertenencias y le pegaron en la cabeza. Obligaron al chofer a continuar con el recorrido y sorprendieron a otro chofer.

La patota se bajó sobre la calle Maxer, cruzaron la calle y a las 5:20 tomaron el interno 90 del ramal 10, otra de las variantes de la 501, que atraviesa casi todo el recorrido de la calle Alem y desemboca en el centro comercial de Monte Grande. La mecánica de coerción para con el conductor del segundo colectivo habría sido la misma, pero con la diferencia de que le pegaron en la nariz, comentaron delegados gremiales.

Luego, el grupo bajó cerca del cementerio. A las 5:40 se subieron en otra unidad del 13, el mismo ramal que habían tomado al principio. Allí, robaron al conductor y a un inspector. Quien resultó agredido.

El reclamo de seguridad. “Nosotros venimos trabajando junto al gremio de la empresa para evitar este tipo de situaciones, pero este hecho fue muy agresivo”, señalaron desde la 501, empresa que aclaró que hay reuniones con la Policía, para que “este tipo de cosas no sucedan”.

La medida de fuerza, que se llevó a cabo para visibilizar el problema, comenzó a regir desde la madrugada hasta el mediodía.

Antecedentes. Un caso similar se produjo en abril del año pasado, cuando un chofer de la 501 también había sido herido. La diferencia radicó en que aquella ocasión el colectivero fue abordado por los delincuentes cuando comenzó su recorrido, durante la madrugada. Como Héctor, el chofer, les explicó a los ladrones que no tenía objetos de valor encima, fue brutalmente golpeado hasta quedar inconsciente. El hecho ocurrió en la esquina de Maipú y Colón, en el barrio Victoria de Monte Grande.

Uno de los más brutales ataques fue en 2010, cuando Ángelo Selarrayán debió ser intervenido quirúrgicamente luego de que un grupo de asaltantes intentara apuntarle los dedos de una mano para robarle sus pertenencias y la recaudación.