Amenazas de muerte, violencia física, denuncias de ambos lados y versiones encontradas sobre lo ocurrido. Con las diferencias políticas como base, así se desarrolla por estos días la interna macrista en Avellaneda.
El espacio que es oficialismo a nivel nacional y provincial lleva meses de conflicto interno en Avellaneda, que la semana pasada terminó de estallar.
Diferencias. Por un lado, se encuentra el concejal y presidente del PRO local desde hace varios años, Daniel García. Por el otro, Gladys González, ex candidata a intendenta y diputada nacional. Desde principios de abril, el edil viene manifestando sus disconformidades con respecto a la legisladora, en una interna que tuvo como detonante el acercamiento del ex intendente Baldomero “Cacho” Álvarez al macrismo de la mano de González.
En este marco, García lanzó el PRO Línea Fundadora y votó en varias oportunidades diferenciado de los concejales Sebastián Vinagre, Daniel Lewicki y Diego Malito del bloque Cambiemos.
Un nuevo capítulo se sumó con la postulación de Laura Garibaldi, esposa de García, para el cargo de Defensor del Pueblo Municipal. La oposición estuvo en desacuerdo con este nombramiento y se retiró del Concejo Deliberante sin dar quórum.
Las versiones del escándalo. Finalmente, en la última sesión, la disputa política llegó a niveles de violencia.
Según García, Gustavo Vázquez, un colaborador de Vinagre, se le acercó luego de la sesión y le advirtió: “A vos y a todos los que están con vos los vamos a matar”. En diálogo con Info Región, el concejal aseguró que no pasó a mayores pero momentos después Vázquez habría irrumpido en su oficina.
“Laura Garibaldi y Susana Scarpatti estaban en mi despacho y me dicen ‘se metió este muchacho acá’. Hubo revuelo de un lado para otro, no sabemos qué pasó. Pero si ellos tienen una oficina arriba, ¿por qué se meten en la mía cuando saben que yo no estaba?”, señaló García, que realizó la denuncia por amenazas en la Fiscalía Nº1 de Avellaneda y responsabilizó a Vinagre y a Gladys González por lo sucedido.
Vinagre, por su parte, señaló: “Yo estaba en otro despacho, pero la versión de Vázquez es que había una gente que acompaña a García, que pasaron por el despacho nuestro amenazando. Me estaban buscando a mí en realidad”.
Indicó que Vázquez “le fue a decir a García que controlara a su gente, y García se sintió amenazado y le pegó”.
Asimismo, Vinagre señaló que Luciana Larrosa, que trabaja como prensa de su bloque, “ha sido amenazada y la dieron de baja del Concejo Deliberante ese mismo día”.
“También después de los hechos de violencia los agresores de Vázquez fueron cobijados dentro de la oficina de Presidencia”, denunció el edil de Cambiemos y señaló que “Vázquez hizo la denuncia correspondiente”, al igual que Larrosa “por las amenazas de García”.
Cómo sigue la interna. García cargó nuevamente contra Gladys González, luego de los sucesos del jueves: “En 12 años que estuve como presidente del PRO nunca tuvimos este tipo de hechos tan graves, se ve que esta chica es como Atila, donde pisa el pasto no crece más. Me parece una barbaridad lo de esta mujer”.
Asimismo, consideró que Vázquez “se fue de boca”. “Me dijo ‘vos sabés que yo estoy con Vinagre y Gladys’. ¿Qué me quiso decir, que está el poder ahí?”, se preguntó.
Por su parte, Vinagre minimizó las palabras de García, quien lo responsabilizó en parte. “También puede responsabilizar a Mauricio Macri, y hasta a Donald Trump. García puede decir lo que quiera, nunca es muy serio lo que dice”, sentenció.
“Entiendo que para defenderse haga un ataque. Son las estrategias de García y de la vieja política, y cuando impera la fuerza en vez de la razón es difícil debatir a las ideas después”, sostuvo Vinagre.
No obstante, asegura que estos hechos no modifican el plano político. “En política nunca creo que haya nada irremediable, y esta diferencia ya la teníamos antes”, aseguró y planteó que “la diferencia es de García con Gladys González”.
“Está enojado conmigo porque en vez de ayudarlo a él, me mantengo independiente de ambos y eso hace que tome represalias contra todo el mundo. Cree que todos son traidores a su causa”, afirmó.
Crece la tensión en el macrismo de Avellaneda
