“Queremos saber qué es lo que pasó con Érica”, reclamó la mamá


La semana pasada, la causa fue elevada a juicio. Tras siete años de idas y vueltas, atravesados por el dolor de no saber qué pasó con la joven embarazada, la familia de Érica Soriano puede tener un poco de paz. Daniel Lagostena será juzgado por homicidio en concurso ideal con aborto en contexto de violencia de género.

El único sospechoso por el crimen de la joven se encuentra detenido desde hace un año y llegará al juicio en esa condición. Esto es importante porque, de haber condena, será de ejecución efectiva y no se esperará hasta que haya sentencia firme.

La familia de Érica “desde hace un montón de tiempo” esperaba que la investigación llegara a este punto, motivo por el que hay tranquilidad, pero ansiedad. “Después de siete años que esto se haya logrado es un logro y nos produce una emoción muy grande porque hemos vivido en una incertidumbre constante”, remarcó a Info Región, Esther, la mamá de Érica. “Tenemos la certeza de que va a estar preso hasta el día del juicio nos genera cierta tranquilidad”, valoró.

Consultada sobre sus expectativas de cara al juicio, admitió que “ya no espera nada de nada ni de nadie”. “Nada me va a devolver a Érica pero hacemos lo mejor que podemos y después descansaremos. Vamos a esperar el tiempo que sea necesario y ya tengo por costumbre no hacer suposiciones ni estimaciones”, enfatizó. “Queríamos tener la posibilidad de llegar a un juicio justo”, recalcó.

La madre de la joven desaparecida subrayó que “en ningún momento” tuvieron “ánimo de venganza” contra Lagostena. “No es que solamente quiero que él pague por lo que hizo a mi hija sino que quiero saber la verdad de lo que sucedió con ella”, manifestó la mujer. “Nada me va a devolver a mi hija pero tengo la tranquilidad de que va a ser juzgado”, insistió.

El caso. Érica Soriano, madre de una adolescente, estaba embarazada de dos meses y medio cuando fue vista por última vez el 20 de agosto de 2010 y la versión de su pareja es que al día siguiente ella se fue a visitar a su madre a la localidad bonaerense de Villa Adelina, pero allí nunca llegó. El fiscal Loureyro y el juez Vítale no creyeron en esa declaración y sostienen que, a pesar de que nunca apareció el cadáver, Érica fue asesinada por Lagostena dentro de la casa que compartían por la mala relación que venían atravesando.

WGS de la Redacción de Info Región