Marcelo Villalba, el hombre de 40 años aprehendido por haber tenido en su poder el teléfono celular de Anahí Benítez, la adolescente encontrada asesinada el 4 de este mes en la reserva de Santa Catalina, se negó ayer a declarar ante las fiscales de la causa y seguirá detenido por “encubrimiento agravado”, informaron fuentes judiciales.
El hombre reside sobre Oliden al 1200, a pocas cuadras del predio donde se encontró el cadáver de la víctima y había entregado dicho aparato a su hijo de 17 años, quien fue el que finalmente lo entregó a los investigadores.
El fondo de la vivienda allanada el miércoles da a un terreno baldío y encontraron allí lo que sería la carcasa del teléfono de Anahí.
Además de Villalba, en la causa continúa detenido Marcos Esteban Bazán, quien está acusado de ser el presunto autor del crimen. En las últimas horas, su abogado Lucio Da Rosa denunció que su defendido sufrió amenazas para declararse culpable.
Se negó a declarar el nuevo detenido por el crimen de Anahí
