Para Garavano, la reunión fue “casi como un acto político”


El ministro de Justicia, Germán Garavano, atribuyó la postura de los organismos de derechos humanos a que estaba "todo guionado, con una mirada ya muy clara, casi como un acto político" y consideró que "cruzaron un límite" cuando, sobre el final de la reunión, acusaron a los funcionarios de conocer el paradero de Maldonado y no revelarlo.

"Fue una reunión larga donde se habló mucho del tema y me quedó un sabor muy amargo, mucha tristeza. Mi sensación es que no hay voluntad de algunos organismos que participaron de la reunión para trabajar colaborativamente, de aunar esfuerzos para esclarecer esta situación", dijo Garavano en declaraciones a radio El Mundo sobre el encuentro del que participó junto a su par de Seguridad, Patricia Bullrich y el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj.

El ministro mencionó que Bullrich hizo "una oferta muy concreta, incluso para viajar a Esquel y trabajar juntos" y que desde su cartera ofrecieron realizar reuniones semanales para seguir "la evolución del caso", lo que rechazado por los dirigentes, entre quienes estaban "Taty" Almeida, de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, y la presidenta de la asociación Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto.

La reunión. Una reunión entre altos funcionarios del Gobierno y representantes de organismos de derechos humanos para tratar la desaparición de Santiago Maldonado concluyó ayer con acusaciones cruzadas, con los ministros de Justicia, Germán Garavano, y de Seguridad, Patricia Bullrich, indicando que las entidades no están dispuestas a trabajar en conjunto, mientras que Estela de Carlotto y Taty Almeida dijeron que la administración nacional no acepta tratar el caso como una desaparición forzada.

En la sede del Ministerio de Justicia, Garavano y Bullrich hablaron de una oposición de las entidades humanitarias a "trabajar en conjunto". "El resultado no fue positivo, no fue el que esperábamos", dijo Garavano, y Bullrich confirmó: "Recibimos una negativa”. “Parece que lo que se busca es acusar al gobierno y ponerlo en una situación difícil”, consideró.

“Hemos salido peor de lo que entramos. Nos siguen mintiendo y, sin ningún tipo de reparo, siguen sin reconocer la desaparición forzada de Santiago”, advirtió Estela de Carlotto. "Durante el encuentro, Bullrich se negó a aceptar que se trata de un caso de desaparición forzada en manos de las fuerzas de seguridad que están a su cargo; evitó asumir la responsabilidad de la Gendarmería y del jefe de Gabinete de su ministerio, el defensor de genocidas Pablo Noceti; e intentó desviar el eje de los cuestionamientos que hicieron los organismos. Asimismo, negó datos que figuran en la causa por la desaparición de Santiago, ocurrida el 1° de agosto último durante la represión de la Gendarmería a la comunidad Pu Lof en Resistencia de Cushamen, Chubut", señalaron desde Abuelas de Plaza de Mayo.