El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 8 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora condenó a prisión perpetua a Ariel Maximiliano Pérez por el crimen de Carlos “Kaly” Ferreiro durante un intento de entradera en junio de 2015. “Más allá de cualquier sentencia, ya nadie nos lo va devolver”, lamentó Matías, hermano de la víctima, en diálogo con Info Región.
Por decisión unánime, el Tribunal condenó al detenido por “robo agravado por uso de armas de fuego y homicidio”. Se trata del único detenido por el crimen, a pesar de que los allegados del fallecido indicaron que del hecho también participaron otros dos cómplices, prófugos desde entonces.
“Queríamos que se condene al culpable para que no destruya otra familia como la nuestra, pero a mi hermano ya no me lo trae más nadie”, aseguró Matías, a la vez que remarcó estar “convencidísimo” de la culpabilidad del condenado, desestimando los dichos de la familia Pérez, que había afirmado desde el principio de la investigación que se trataba “de una causa armada por la policía”.
“Yo sé que es el culpable”, remarcó Matías y recordó que su otro hermano lo reconoció durante una de las audiencias realizadas previo al veredicto, lo que consideró “fundamental” para la causa.
Por su parte, los allegados de Pérez hicieron hincapié en “la falta de pruebas” y volvieron a resaltar su “inocencia”. “La policía necesitaba un culpable por presión de la familia de Kaly. Lo agarraron a mi hijo sin tener en cuenta todas las pruebas que demuestran que él no tuvo nada que ver”, indicó a este medio la madre del condenado, Silvia Rosa López, que además denunció previo a la sentencia que su hijo sufría “golpizas de la policía del penal donde está detenido desde el viernes”.
“Vamos a continuar con esto hasta que se sepa la verdad y se encuentre al verdadero culpable de la muerte de Kaly. Nosotros también queremos Justicia para esa pobre familia que perdió a su familiar, pero mi hijo no tiene nada que ver”, manifestó y comentó que cuenta con el apoyo de Madres del Dolor.
El hecho. El 5 de junio de 2015, cerca de las 21, el hermano de Carlos Ferreiro volvía con sus hijas a su casa, y cuando estaba cerrando el portón eléctrico del garaje -después de haber entrado el auto-, una persona se metió en la casa con un arma y otros dos se quedaron afuera. Según explicó la familia, Carlos fue corriendo a ver lo que pasaba porque había escuchado los gritos de su hermano y logró tomar al ladrón por la espalda y en el medio del forcejeo, le disparan.
Inmediatamente familiares llamaron a la ambulancia y a la Policía, pero el ladrón escapó. Los efectivos que arribaron al lugar del hecho fueron los encargados de trasladar al vecino herido al hospital Luisa Cravena de Gandulfo. El hombre ingresó al centro de salud en grave estado y murió el 9 de junio, tras la cuarta operación.
LGO de la Redacción de Info Región.
Condenaron a perpetua al imputado por el crimen de “Kaly”
