A cinco meses de su muerte, se realizará un festival musical y artístico para pedir Justicia por Gonzalo Fernández, el joven de 22 años que, según su familia, fue asesinado por la policía en una comisaría del barrio San José, en Almirante Brown. La jornada, apuntaron, buscará “seguir recordándolo” y pedir el esclarecimiento del caso, aseguró Graciela, su madre.
Durante el festival, habrá bandas en vivo, una murga, juegos para niños y stands con comida y mercadería aportada por la organización Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), que durante estos meses dio su apoyo a la familia para investigar el caso.
El encuentro será hoy, desde las 12, en Belgrano 1516, entre Sánchez y Canale, en la esquina de la casa de la familia Fernández, en el barrio San José.
La iniciativa se suma a otras dos marchas que se hicieron en los últimos meses para pedir Justicia ante la comisaría donde el joven murió. La familia denunció que, tras esas movilizaciones, recibieron “intimidaciones” por parte de las autoridades involucradas.
El caso. Gonzalo fue detenido por una discusión con un vecino a alrededor de las cinco de la madrugada del 18 de junio. Verónica, su pareja, intentó visitarlo unas horas después pero le dijeron que todavía no podía verlo.
A las 18, la mujer partió camino a la Comisaría de San José con comida y frazadas. Graciela, la madre de Gonzalo, se había quedado en casa cuidando a su nieta, pero un patrullero fue a buscarla con la excusa de que tenía que hacer unas declaraciones.
“Señora, tengo que darle una mala noticia: su hijo se ahorcó”, le dijo uno de los oficiales, según relató Graciela a Info Región. Verónica llegó con las cosas que había preparado para su pareja y se encontró con el ataque de llanto de su suegra y la noticia de que Gonzalo estaba muerto.
Cuando pasó la conmoción inicial, la familia comenzó a sospechar de la versión oficial. “Mi marido fue a reconocer el cuerpo a la morgue y estaba todo golpeado, cosa que no tenía cuando lo detuvieron”, relató Graciela. “Cuando lo vimos en el velatorio estaba todo golpeado: la cabeza lastimada, la cara rota, le faltaba un diente. Si fuera verdad que se ahorcó, ¿los golpes de dónde salieron?”, cuestionó la mujer.
Gonzalo no tenía ninguna razón para suicidarse e incluso dejó una nota para Verónica en la que le pedía ayuda para salir lo más pronto posible, ya que le preocupaba su trabajo. En la comisaría nunca mencionaron esa carta: la familia solamente se enteró de su existencia cuando la fiscalía les entregó una fotocopia de la misma. Nunca les devolvieron las pertenencias del joven.
“Lo único que esperamos es que se sepa la verdad, que a él lo mataron ahí. Le pegaron mal, se les fue la mano, y algo tenían que inventar. Estamos muy seguros de que fue la policía”, ratificó Graciela.
Actualmente la causa se encuentra estancada. Todos los policías que estuvieron ahí esa noche están siendo investigados, pero no hubo ningún avance para esclarecer los motivos de la muerte. La familia, sin embargo, no baja los brazos, y el padre de Gonzalo va una vez por semana hasta los Tribunales de Lomas de Zamora para ver cómo va la causa y reclamar por justicia.
Realizarán un festival para pedir Justicia por Gonzalo
