En una multitudinaria misa, Francisco bregó por la “reconciliación”


A treinta años de la visita de san Juan Pablo II, el Papa Francisco encabeza una visita a Chile, que finalizará el 18, cuando emprenda camino a Perú, el otro destino previsto. Convocó a la “reconciliación” y trabajar por la paz.

Francisco animó a unos 400.000 fieles en el Parque O'Higgins de Santiago a "que el espíritu de la reconciliación gane espacio " y los convocó a "construir la paz", en su primera misa en Chile. "Frente a la resignación que como un murmullo grosero socava nuestros lazos vitales y nos divide, Jesús nos dice bienaventurados los que se comprometen por la reconciliación", planteó.

Francisco destacó a "aquellos que son capaces de ensuciarse las manos y trabajar para que otros vivan en paz" y de "aquellos que se esfuerzan por no sembrar división".

Más temprano, expresó su "dolor” y “vergüenza” por “el daño irreparable causado a niños por parte de ministros de la iglesia”. Lo dijo en su primer discurso en Chile, pronunciado en el Palacio de la Moneda del estado trasandino.

Luego, mantuvo en encuentro privado con la presidenta Michelle Bachelet. "Esperamos que su visita, así como es un regalo para nosotros, sea un momento de alegría para usted, por el cariño y compromiso de chilenos y chilenas que irán a su encuentro", expresó Bachelet, quien advirtió que Chile no olvida “la mediación papal que evitó una guerra absurda” ni “a la Iglesia comprometida con los derechos humanos, con las libertades públicas, con los derechos sociales".