"Los responsables políticos de la represión deberían estar en la cárcel y los luchadores sociales vivos”, afirmó el padre de Darío, Alberto Santillán.
“Hoy estamos acá para honrar la memoria de Darío y Maxi (Kosteki), que murieron en una represión ordenada por el poder político. Los responsables deberían estar presos, y los luchadores militantes como ellos con vida”, apuntó el padre de Darío Santillán al hablar en una manifestación que se llevó a cabo en el Puente Pueyrredón.
Alberto volvió a reclamar que el juez Ariel Lijo, a cargo de la causa que investiga las responsabilidades políticas en esa represión, que “avance sobre quienes dieron las órdenes para que haya justicia”. “Hubo una orden que bajó del poder político para que se reprimiera. El juez Lijo debe tener en este caso la misma celeridad que tuvo para activar otras causas”, reclamó.
Y en ese sentido, remarcó: “No sólo estamos acá por nuestros dos muertos. Estamos por todos los militantes que cayeron y los que están presos por reclamar una sociedad más justa. El 26 de junio de 2002, en el contexto de la grave crisis social que atravesaba Argentina, varias organizaciones sociales intentaron manifestarse sobre el Puente Pueyrredón, pero con una incruenta represión, la Policía bonaerense lo impidió.
El caso y la opinión de familiares
Darío Santillán y Maximiliano Kosteki fueron perseguidos por efectivos policiales hasta la estación Avellaneda del Ferrocarril Roca, donde los ejecutaron a tiros por la espalda. Por esos asesinatos resultaron condenados en 2005 el comisario Alfredo Fanchiotti y el cabo Alejandro Acosta, quienes efectuaron los disparos.
Sin embargo, los familiares de las víctimas reclaman que se juzgue a los responsables políticos, y acusan a Duhalde, el entonces gobernador de la provincia de Buenos Aires, Felipe Solá y Juan José Alvarez, que estaba al frente de la Secretaría de Seguridad de la Nación.
“Este es otro 26 de junio más, en el que estamos juntos personas que pensamos distinto y venimos de distintos lugares, pero reclamamos justicia. Debemos juntarnos también para otras cosas, y luchar para cambiar la sociedad”, enfatizó Alberto.
A 12 años de su asesinato, familiares recordaron a Kosteki y Santillán
