Aseguran que aumentaron las consultas por bulimia y anorexia


Con la llegada del verano y los días de calor, los trastornos de alimentación se hacen más notorios, la necesidad de verse delgado y en forma aumentan la probabilidad del crecimiento de la bulimia y la anorexia.

El coordinador general de la Asociación de Lucha contra la Bulimia y la Anorexia (ALUBA), Ricardo De León, indicó que las consultas aumentaron "un 30 por ciento" en relación al mismo periodo de 2007 y señaló que la sede, ubicada en Azara 1820 en Banfield, recibe más de 25 inquietudes a diario.

El trastorno en la alimentación es un problema que afecta a adolescentes y adultos, quienes en el afán de verse bien optan por dejar de comer; entonces ingresan en un camino de “difícil retorno”.

“La bulimia y la anorexia son enfermedades más complicadas de lo que socialmente se cree. El padecimiento de estas afecciones por mucho tiempo puede generar serios problemas de salud en el corto plazo como osteoporosis, inconvenientes en el desarrollo de los caracteres sexuales y en el aprendizaje”, explicó a Info Región De León.

Las charlas de orientación permiten que familiares y amigos de personas que muestran signos de estos padecimientos se acerquen a buscar ayuda y asesoramiento sobre cómo lograr que los afectados emprendan la recuperación.

“Estas afecciones son similares a una adicción y para la estabilización de una persona se necesitan al menos unos ocho meses y para la recuperación total deben pasar cuatro años sin que el paciente tenga contacto con el objeto de su adicción”, sostuvo el especialista.

Y agregó: “Lo que hay que comprender es que esta enfermedad no se cura comiendo, ya que el problema es emocional y en ese eje ronda el tratamiento. Muchas veces el paciente cree verse bien cuando en realidad no lo está, por eso se acercan primero sus familiares”.

En los adolescentes la dificultad está en aceptar que está cambiando el cuerpo y esta patología afecta a personas “débiles” y “vulnerables”. Las estadísticas señalan que 1 de cada 25 adolescentes sufre algún desorden alimentario y que de ellas, el 10 por ciento padece bulimia o anorexia.

Según la estadística de la Organización Mundial de la Salud, explicó De León, del total de las personas que padecen este tipo de afecciones el 20 por ciento muere. “Las conductas purgativas y vómitos genera la pérdida de iones como el potasio y ese déficit produce paros cardiorrespiratorios”, detalló.

Los especialistas recomiendan realizar una consulta cuanto antes, ya que es una enfermedad que al ser ignorada puede ocasionar la muerte.

Síntomas:

No comer.

Selecciona o desmenuzar mucho la comida.

Aislamiento y falta de comunicación.

Pérdida de peso.



Charlas

Miércoles 9:00 en Azara 1820, Banfield.



Anorexia: falta de conciencia de la enfermedad, miedo intenso a la obesidad, distorsión del esquema corporal, rechazo a mantener el peso en nivel normal, amenorrea, piel seca, hipotensión, hipotermia, corte de los alimentos en trozos pequeños, masticado lento y largo antes de tragar, elección de porciones muy pequeñas.

Además, provoca conductas obsesivas, extrema autoexigencia, rechazo a la sexualidad, atracones y uso de ropa suelta.



Bulimia: sentimiento de no poder con la ingesta, deterioro de piezas dentarias en vomitadores, alternancia con ciclos restrictivos, conductas compensatorias como escupir, abuso de laxantes, abuso de líquidos para compensar el hambre o provocación del vómito, ayuno, hiperactividad, cortado de los alimentos en trozos grandes, ingesta rápida, masticado rápido.