Los trabajadores de Canale levantan la permanencia pacífica tras 120 días con la esperanza de que la Justicia habilite al espacio para que siga funcionando como una cooperativa.
Fueron muchos meses de incertidumbre y sacrificio, pero los operarios se mantuvieron siempre frente a la fábrica ubicada en Libres del Sur 19, en la localidad lomense de Llavallol.
“Fue durísimo lo que vivimos pero sentimos que era algo necesario, que teníamos que hacer si queríamos seguir trabajando. Fue un desgaste enorme pero estamos orgullosos de que hicimos todo lo que estaba a nuestro alcance para conservar nuestros puestos de trabajo”, expresó el referente de los trabajadores de la fábrica Nicolás Macchi en diálogo con Info Región.
Sostuvo, en esa línea, que fue “muy difícil para las familias de los operarios porque estuvieron “un montón de horas fuera” de sus hogares y sin recibir su sueldo. “Vamos a ponerle toda la fuerza en el camino para lograr nuestro objetivo”, enfatizó.
Comienza una nueva etapa
Semanas atrás, un grupo de trabajadores viajaron a Catamarca para reunirse con el juez a cargo del juzgado Comercial de esa provincia, donde se encuentra la causa por el cierre de la fábrica. La intención del viaje fue tratar de acelerar los trámites en la Justicia para convertir el espacio en una cooperativa.
Después de meses de lucha, la Justicia les otorgó la custodia de los bienes y más tarde, lograron conformar la Cooperativa de Trabajo Metalúrgica de Llavallol (COTRAMELL). Para ello, necesitaron reunir dos tercios de los operarios despedidos, una tarea difícil “por el desgaste” por los días transcurridos y la falta de trabajo.
Pese a su conformación oficial y la certificación, resta que el juez les otorgue la fábrica para poder funcionar allí con 60 trabajadores de los 86 que fueron cesanteados el año pasado. “Se abre una nueva etapa. Falta que se decrete y firme la quiebra, pero ya está todo preparado para que eso suceda. Confiamos en que va a quedar a cargo de los trabajadores porque no hay otras ofertas”, explicó Macchi.
En este escenario, explicó: “Decidimos levantar el acampe y no esperar el proceso judicial porque si seguimos esperando también puede llegar a tardar más de lo esperado y ya no tiene sentido”.´Así, este sábado quedó formalmente levantado el acampe frente a la planta de Llavallol.