Gastón Aguirre puso punto final a su carrera profesional como futbolista. A sus 38 años el defensor colgó los botines luego de un semestre con altibajos en San Martín de Burzaco y ahora sueña con un nuevo panorama en esta etapa fuera de las canchas.
Su extensa y satisfactoria carrera estuvo marcada por la identificación con Temperley, club del cual es hincha y consiguió dos ascensos consecutivos hasta llegar a la Primera División. Ante este nuevo escenario sueña con “seguir ligado” al Gasolero y aportar su “experiencia a los más chicos”.
En ese sentido, en charla con Info Región, comentó: “Es difícil dejar de ser jugador profesional, porque jugar al fútbol lo voy a hacer toda la vida. Son muchos años dedicado a esto y es una decisión que venía pensando hace bastante. Tuve alguna complicaciones con lesiones, tengo 38 años y era momento de parar la pelota”.
La decisión
La última etapa de Aguirre en las canchas estuvo enmarcada en el sur del conurbano bonaerense, luego de su salida de Temperley emigró a Tristán Suárez, donde disputó una temporada, y más tarde llegó a San Martín de Burzaco, en la Primera C, escenario en el que se despidió de la actividad.
“Termino mi carrera de la mejor manera. Pretendía retirarme en Temperley, pero las cosas que transité en los últimos años me cambiaron la vida por completo. Hemos dejado la vara muy alta en el club. Estoy satisfecho con lo que me dio el fútbol, no cambiaría nada”, indicó.
En paralelo, valoró su relación con el Celeste y reconoció a Sanma, el club que lo vio por última vez como jugador profesional: “Temperley es todo en mi vida, ojalá pueda estar ligado a la institución a lo largo de muchos años. Cuando me fui consideré que habían sido muchos años de continuidad y estaba bueno cambiar de aire, ahora me tocó retirarme en un club humilde que me dio todo en estos últimos seis meses y estoy agradecido”.
Con expectativas
Una vez finalizado su proceso como futbolista profesional, Aguirre analiza la chance de continuar relacionado al deporte y, sobre todo, a la institución de la cual es hincha. Aprovechó el tiempo que le dieron las lesiones en su carrera para instruirse y recibirse como entrenador, por lo que en primera instancia apuesta a ser un nexo con los más jóvenes.
“Estoy sumamente feliz de dar este paso porque me acompaña gente que me quiere de verdad y entiendo los mensajes del hincha como que hice algo bueno en el fútbol. Siempre me veo relacionado a Temperley, soy técnico desde el 2009 porque aproveché mis lesiones para estudiar. Quiero aportarle cosas a los más chicos, compartir mis historias y poner mucho trabajo y dedicación”, sentenció Aguirre, en contacto con Info Región.