El presidente Alberto Fernández sostuvo que “no hubo conflicto” con los mandatarios de la ciudad y provincia de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba que decidieron no autorizar las horas de esparcimiento anunciadas el último sábado por el Ejecutivo nacional.
“En los gobernadores veo vocación de cuidar a su gente y por eso me tienen a su lado. Pero lo que digo también es que presten atención. No podemos mantener a la gente en un encierro eterno”, aseguró el Jefe de Estado.
En esa sintonía, el mandatario subrayó que “no hubo tal conflicto” con los jefes de los distritos ya que “el decreto prevé que las condiciones de salida las fijaba cada provincia según su situación epidemiológica”.
“El comunicado que sacaron los gobernadores lo hablaron antes conmigo y les dije que me parecía bien que lo hicieran si sentían que no podían controlar el tema”, destacó Fernández en declaraciones radiales.
Y agregó: “Al mismo tiempo que vengo recibiendo a los gobernadores para abrir ciertas actividades, me reúno con especialistas en materia epidemiológica que me plantearon que era necesario hacer algún grado de apertura para que la gente pudiera salir de las cuatro paredes para dar una vuelta y volver a la casa”.
Finalmente, el Presidente indicó que entiende que “hay más de 70 por ciento de la geografía argentina que no está corriendo riesgo de contagiarse” y que, por lo tanto, “había que flexibilizar un poquito esa cuarentena”.