Las miradas apuntan a la Ciudad de Buenos Aires. Tanto intendentes como autoridades provinciales consideran imprudente la apertura comercial en territorio porteño. El temor hoy es que “se descontrole todo”, aludiendo a un eventual contagio masivo de coronavirus.
El viceministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, reconoció hoy que existe “preocupación” por el movimiento de personas que implica la habilitación de nuevas actividades y comercios en la Ciudad de Buenos Aires, y estimó que “no es momento de aumentar la circulación” porque eleva el riesgo de contagio de coronavirus. “La decisión de la Ciudad de abrir los comercios nos preocupa, creemos que tiene que estar funcionando sólo lo esencial y los locales de cercanía”, planteó el funcionario bonaerense en declaraciones formuladas a Radio Provincia.
Para Kreplak, “que la Ciudad de Buenos Aires habilite el comercio, que es el paradigma histórico de movimiento de gente, es preocupante porque aumenta el tránsito ya que la gente de la provincia va a trabajar, a vender o comprar” a ese distrito. Consideró, entonces, que “sólo deberían funcionar los comercios esencial, de barrio o de cercanía, como ocurre en el Gran Buenos Aires”.
“El peor escenario epidemiológico es el traslado de la gente porque una persona que vive en un lugar donde no hay casos, va a Capital, se contagia y puede contagiar en su barrio”, evaluó el viceministro, quien admitió que “hay mucha preocupación en barrios vulnerables y en el Conurbano, el miedo es que con alguna flexibilización se descontrole todo porque volver atrás no es sencillo y nada garantiza que sea lo mismo”.