Gustavo Mbombaj se sumó a Los Andes y defenderá los colores de la institución por segunda vez en su carrera. En la primera etapa no logró asentarse, pero vuelve con 29 años para demostrar su crecimiento futbolístico y con el objetivo de devolver al club a la Primera Nacional.
En una charla con Info Región, el volante admitió: “Tuve un paso fugaz en el que no fue lo esperado y debí irme por la puerta de atrás. Llego más grande, con otra cabeza y mentalidad”. “La idea es hacer las cosas bien, cumplir objetivos y quedarme mucho tiempo en el club”, apuntó.
“Es un club muy grande, estuvo en Primera y mínimamente tienen que volver a la Primera Nacional por lo que significa como institución, por el estadio, la historia y su gente. Por todas estas cosas no lo dudé cuando me llamaron”, planteó.
Los desafíos
Mbombaj trabaja vía Zoom con el plantel a la espera del regreso de los entrenamientos presenciales. Con muchas ilusiones y expectativas, el jugador sabe que tendrán presión para pelear arriba y recuperar el terreno que como equipo perdió Los Andes en los últimos años.
En torno a lo que viene y el proyecto futbolístico que encabeza Germán Cavalieri, analizó: “Es algo bueno lo que está armando en Los Andes, no sucede en todos lados. Es positivo que se le dé lugar a los pibes del club porque, sobre todo en el ascenso, son la base que te da un salto de calidad a la institución y también en lo económico. Por otra parte, que algunos jueguen motiva a los demás a saber que van a tener la oportunidad si hacen las cosas bien”.
En esa línea, apuntó: “No me considero un referente. Siempre trato de demostrar lo mío, sumando para el grupo en todos los aspectos y hablando poco. Quiero ganarme un lugar y mantener un buen rendimientos para sostenerme en el once”.
Crecimiento
El oriundo de Posadas volverá a compartir campo de juego con Alejandro Noriega y Christian Cepeda, con quienes formó parte del plantel en la UAI Urquiza. En su última temporada vistió la camiseta de Sarmiento de Resistencia, Chaco. Ahora, espera demostrar todo lo aprendido y, tras siete años, ganarse la confianza de la gente Milrayitas.
“Fueron muchos años desde el primer paso. No me considero grande ni tampoco un pibe. Con 29 años cuento con muchos partidos encima, pasé por algunos clubes y compartí vestuario con gente que me aportó mucho. Me gustaría colaborar desde donde me toque, apoyar a los más chicos y que se puedan copiar cosas buenas de los referentes”, sentenció Mbombaj, en diálogo con este medio.
