El Ministerio de las Mujeres de la provincia de Buenos Aires reveló hoy que un 66,5% de las mujeres no recibe ningún tipo de aporte por parte del padre de sus hijos; mientras que el 51,2% no perciben ningún tipo de aporte en tanto y que del 41,2% que sí recibe dinero, un 24,9% lo percibe con regularidad, y un 15,3% de manera irregular.
El informe Incumplimiento de la obligación alimentaria en la Provincia de Buenos Aires: un problema estructural precisa que más de la mitad de las encuestadas no recibe obligación alimentaria, o sólo la percibe eventualmente y que “en una notable menor proporción (7,9%), las mujeres señalan que el progenitor cumple con sus obligaciones alimentarias a través de la cobertura de gastos y necesidades de manera directa”, explicaron.
Entre los datos que se destacan, resalta que en los casos en que el progenitor cumple con sus obligaciones alimentarias, el monto resulta escaso, o alcanza a cubrir solo algún gasto o necesidad particular de sus hijos, por lo que solo el 10% considera que es suficiente para cubrir los gastos y necesidades.
Implementado entre junio y agosto de 2021, pone de relieve que casi la mitad de las encuestadas de la provincia menciona que el dinero que aporta el progenitor no alcanza para cubrir gastos mínimos; el 33% considera que el aporte únicamente cubre alimentos, el 7% responde que ese aporte monetario sólo permite cubrir gastos escolares o de salud, y el 2% menciona que alcanza solo para actividades extra escolares.
Frente a lo escaso o el incumplimiento de las obligaciones alimentarias, las encuestadas describen “múltiples estrategias que desarrollan para garantizar las necesidades de sus hijas e hijos. Muchas de estas estrategias implican un costo alto para sus condiciones de vida y las del hogar”, subraya el trabajo.
En ese sentido, el 32% de las encuestadas indicó que tuvo que solicitar ayuda o aportes económicos a otros miembros de la familia o personas del círculo cercano ante el incumplimiento, e incluso el 12% se encontró en la necesidad de solicitar créditos o préstamos para cubrir gastos o necesidades de cuidado. En otras palabras: 44% depende de dinero prestado, ya sea de familiares como de bancos y financieras, para completar sus ingresos mensuales.
“Dentro del conjunto de personas que respondieron la encuesta, el 54% son mujeres que están al frente de hogares monomarentales“, informan desde el cartera.
Al respecto, entre las mujeres a cargo de hogares con menores de cinco años y que no reciben aportes del progenitor, el 27,2% indica que trabaja más de 30 horas semanales, y el 37,9% no sabe calcular la cantidad de horas que trabaja, o indica que la cantidad cambia semanalmente. ¿La principal fuente de ingresos de estos hogares?: la Asignación Universal por Hijo (AUH).
Las respuestas que nutrieron el informe fueron obtenidas mediante encuestas virtuales y entrevistas en profundidad en donde la mayor parte de las encuestadas se ubica en un rango etario de entre 26 y 55 años que trabajan en relación de dependencia formal (41,7%), están desocupadas (18,1%), son cuentapropistas (9,8%) y integran la economía popular (19,4%), o son empleadas informales (7,3%).
