La Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (FCA-UNLZ) está desarrollando este año un ambicioso proyecto, orientado a transformar a esta casa de altos estudios del conurbano bonaerense en la primera de la provincia de Buenos Aires en tener un campus universitario donde se encuentran todos los edificios y ámbitos de las distintas facultades y con un espacio de experimentación agropecuario.
“Nuestro desafío es armar y consolidar un campus universitario de acá a los próximos 4 o 5 años”, asegura Horacio Gegunde, vicerrector Administrativo de la UNLZ.
El proyecto fue avanzando por etapas y ahora se está dando un paso trascendental. Coincidiendo con el cincuentenario de la creación de la Universidad -se conmemoró en 2022- se están construyendo los laboratorios de la Facultad de Ciencias Agrarias, así como el campo experimental. Estima el vicerrector que “en poco tiempo más saldrá el pliego de licitación de los laboratorios, lo que implica que antes de fin de año estará la obra terminada”.
El plan de obra es importante, por cuanto además de los laboratorios, que estarán dispuestos en un edificio de dos plantas, se destinará también en forma contigua un sector de 4,5 hectáreas -de un total de 47 hectáreas que tiene la Universidad- para que allí empiece a funcionar el campo de experimentación de la Facultad de Ciencias Agrarias.
Gracias a ello, podrán ingresar los animales, maquinarias y todo el sector ictícola, que todavía se encuentran en los terrenos que actualmente ocupa la Facultad en el predio de Santa Catalina, partido de Lomas de Zamora, pero que pertenecen a la Universidad Nacional de La Plata.
Además de estas 4,5 hectáreas iniciales, está la posibilidad de crecer otras cuatro hectáreas más. “Así, lo que Agrarias tenía disperso en diferentes campos que alquilaba, como en La Lomada o Virrey del Pino, lo tendrá cruzando la calle. Y sería la primera facultadde la provincia que en el campus universitario tendrá el campo de experimentación”, se entusiasma Gegunde.
Conocedores del terreno y las necesidades que demandan las diversas actividades agropecuarias, en el Rectorado entienden que el predio será “para hacer experimentación” que es lo que necesitan los alumnos en las distintas etapas de las carreras.
Los recursos para avanzar con las obras son presupuesto universitario ya aprobados para este año, a los que se sumarán otras partidas que se están solicitando al Ministerio de Educación de la Nación. Además, se está gestionando un financiamiento específico con la Comisión Andina de Fomento (CAF-Banco de Desarrollo de América Latina), destinado a la construcción de los laboratorios de la planta inferior, que es la que utilizarán los alumnos, mientras que la planta alta estará reservada a investigadores.