La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) tiene en la mira a la sociedad de bolsa Balanz Capital Valores a la que acusa de permitir operaciones irregulares por lo cual la empresa sería suspendida por la Comisión Nacional de Valores (CNV), aunque los clientes no se verán afectados.
Según dio a conocer hoy la AFIP se habrían detectado operaciones irregulares que fueron protagonizadas por 857 contribuyentes con CUIT inactiva o que no fueron localizados en su domicilio muchos de los cuales estaban radicados en Luis Guillón y El Jagüel, en el municipio de Esteban Echeverría.
En total, operaron $475 millones y efectuaron retiros de dólar MEP por US$650.000, según la información oficial. También se encontraron contribuyentes que efectuaron operaciones de dólar contado con liquidación (CCL), pero que estaban incluidos en la base (eAPOC) o de facturas truchas, como se conoce habitualmente.
Además de las operaciones que se efectuaron a través de los dólares financieros, desde el ente recaudador constataron operaciones de compra de bonos por $8.000 millones realizadas por dos personas físicas que no presentaron sus declaraciones juradas del Impuesto a los Bienes Personales.
“Ambos contribuyentes no presentaron voluntariamente el pago del Aporte Solidario Extraordinario (ASE) por lo cual se les inició una fiscalización”, informaron.
Tras poner al tanto a la Comisión Nacional de Valores (CNV), desde el organismo adelantaron que se vería suspendida la operatoria con cartera propia de Balanz. Sin embargo, aseguraron que este hecho no afecta a la operatoria y los fondos propios de los clientes.
A su vez, la maniobra fue denunciada ante la Justicia Federal y la ProCElaC (Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos) con el propósito de evitar el uso de actores apócrifos o sin capacidad económica declarada en maniobras bursátiles.
Cómo fue la denuncia
Hubo varios motivos por los cuales estos 857 contribuyentes tenían la inhabilitación de la CUIT. En parte, la AFIFP detectó inconsistencias tales como estar incluidos en base eAPOC -una base que registra facturas apócrifas- o el no haber solicitado el alta en impuestos o regímenes.
Otro tanto fue por no haber efectuado la presentación de declaraciones juradas (DDJJ) o que, habiéndolas presentado, no registraron ventas, ingresos, ni empleados en relación de dependencia declarados.
“La AFIP ya comenzó las fiscalizaciones a todos los contribuyentes antes mencionados a fin de que los mismos justifiquen el origen de los fondos utilizados; como así también el real comprador de las operaciones; detectando hasta el momento que muchos de sus domicilios no se corresponden con personas que posean capacidad económica para hacer frente a las mismas”, explicaron.
Además, deslizaron que “lo llamativo” fue que encontraron contribuyentes que se encontraban en la base de “facturas truchas”. Así, se verificaron inconsistencias relacionadas con la capacidad operativa, económica o financiera que “difería” de la magnitud, calidad o condiciones que pusieron en sus declaraciones juradas, los comprobantes respaldatorios emitidos o que no reflejaban las operaciones que se intentaban documentar. “Esto permite concluir que no son proveedores reales de servicios o mercaderías”, cerraron.