El Gobierno envió este miércoles al Congreso el paquete de reforma fiscal que incluye la reimplantación del Impuesto a las Ganancias para los trabajadores, ahora denominado “Ingresos Personales”. La iniciativa también plantea una amplia moratoria impositiva y previsional, así como un blanqueo de capitales.
Regreso del Impuesto a las Ganancias
La propuesta del Ejecutivo establece un piso de $1.800.000 para la cuarta categoría del impuesto (empleados), con una primera escala del 5%. Además, mantiene los beneficios para los trabajadores petroleros de pozo, quienes no deberán integrar el adicional a la base imponible del tributo.
Según el proyecto, se considerará personal de pozo a quienes trabajen en “la exploración petrolífera o gasífera llevada a cabo en campaña y en tareas desempeñadas en boca de pozo y afectadas a la perforación, terminación, mantenimiento y reparación de pozos petrolíferos o gasíferos”.
Por otra parte, elimina otras posibilidades de moderar el impacto ya que establece que no resultarán aplicables las disposiciones contenidas en ningún tipo de leyes, decretos o convenios colectivos de trabajo, excepto las de la Ley del Impuesto a las Ganancias y la Ley 26.176. De ese modo los beneficios sectoriales conseguidos en los últimos años por algunos gremios no tendrán validez a la hora de aplicar la nueva alícuota del impuesto.
Moratoria impositiva y blanqueo de capitales
Otro aspecto importante de la reforma es el lanzamiento de un Régimen de Regularización Excepcional de Obligaciones Tributarias, Aduaneras y de Seguridad Social, es decir, una amplia moratoria impositiva y previsional.
Asimismo, el proyecto incluye un Régimen de Regularización de Activos, un blanqueo de capitales.
Otras modificaciones
La reforma fiscal también contempla cambios en el Impuesto sobre los Bienes Personales e Impuestos Internos. Además, elimina el Impuesto a la Transferencia de Inmuebles de Personas Físicas y Sucesiones Indivisas, y modifica el Régimen Simplificado para Pequeños Contribuyentes.
El Gobierno apunta a tratar el proyecto de reforma fiscal en un plenario de comisiones la semana que viene, paralelamente a la discusión de la Ley Ómnibus, que será reflotada a través de un nuevo dictamen.