El brutal ajuste del gasto impacta de manera desigual: Cuánto aportan los jubilados, las provincias y la universidades


La política económica de la administración de Javier Milei puso el foco en la reducción del gasto público como una de las herramientas centrales para alcanzar el superávit fiscal y financiero, paso previo, promete, a la caída de la inflación y la anhelada recuperación económica. Sin embargo, el impacto de este ajuste en estos primeros ocho meses del año no ha sido equitativo entre los distintos sectores: de cada 100 pesos que ahorró el Gobierno, 26 lo aportaron los jubilados.

Un análisis detallado elaborado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) pone en evidencia que ciertos rubros han soportado una porción mayor del ajuste, entre los que se destacan los jubilados como los más afectados.

El informe revela que el recorte total del gasto público nacional en los primeros ocho meses del año acumuló 25,9 billones de pesos (constantes de agosto de 2024), en comparación con el mismo período de 2023. De los 16 rubros en los que se organiza el gasto público, el gobierno nacional recortó partidas en términos reales en 14, por un total de 26,3 billones de pesos. En cambio, en en los otros dos incrementó el gasto real en 400 mil millones de pesos. De la diferencia surge la caída neta del gasto primario cercana a los 26 billones mencionados.

Principales rubros afectados

El mayor impacto del ajuste recayó sobre las jubilaciones y pensiones contributivas, las cuales representaron un 26% del recorte total, lo que equivale a una reducción de 6.858.981,82 millones. Vale decir que de cada 100 pesos que se recortaron, 26 fue quitado a los adultos mayores a través, fundamentalmente, de la baja de sus haberes en términos reales. A pesar de que este rubro disminuyó en 1 punto porcentual respecto al mes anterior, sigue siendo el segmento más afectado por la contracción del gasto público.

Otro de los rubros más impactados por el recorte fue la obra pública, contenida en el apartado inversión real directa, con una participación del 15% del ajuste total, equivalente a $3.916.533,23 millones. Este recorte refleja una disminución en proyectos de infraestructura y otras inversiones físicas directas que suelen tener un impacto en el crecimiento económico a largo plazo.

El ajuste también afectó a las transferencias corrientes a provincias, que representaron un 7% del total, lo que implicó una reducción de $1.775.403,41 millones. Sumado a esto, las transferencias de capital a provincias participaron con el 8% del recorte, equivalente a $2.035.946,73 millones.

Los subsidios a la energía, un área clave en la política de subsidios del Estado, redujeron su participación en un 11%, con un ajuste total de $3.027.666,20 millones. Este rubro ha sido uno de los de mayor impacto sobre la inflación y el costo de vida. Si se le suma el 2% proveniente del recorte a los subsidios al transporte, el sector completa un 13% del total.

Por otro lado, la licuación de los salarios del sector público, que implica una caída en términos reales del poder de compra, explica el 8% del ahorro, con una reducción de $2.167.881,08 millones. Los programas sociales, a su vez, aportan el 8% también, con una caída de $2.143.841,85 millones, lo que refleja un ajuste en áreas clave para la población más vulnerable.

Universidades y otros Rubros Afectados

Si bien estos fueron los principales sectores que soportaron el ajuste, otros rubros también experimentaron recortes significativos. Los bienes y servicios, que incluyen gastos operativos del Estado, participan del ajuste con el 4%, con una reducción de $970.645,18 millones. Otros gastos corrientes también cayeron en un 4%, con una reducción de $951.949,74 millones.

Las transferencias a universidades representaron un 3% del recorte total, con una disminución de $746.585,89 millones, lo que explica la movilización y el plan de lucha en marcha en el sector educativo de nivel superior.

Menores Reducciones

Entre los rubros con menor participación se encuentran las asignaciones familiares y pensiones no contributivas, que limitan su aporte al ahorro general con un 2%, equivalente a $577.275,69 millones, y los subsidios al transporte, con una caída de $610.347,91 millones, lo que representa un 2% del ajuste total.

Dos de los rubros que aportan menos al recorte son las asignaciones familiares por hijo, que con $458.212,93 millones aporta 2%, y los subsidios a otras funciones con un ajuste de $92.530,18 millones.

La distribución del ajuste muestra claramente cómo diferentes sectores han sido impactados de manera dispar, con los jubilados a la cabeza de la lista.

El ajuste en números

RubroMonto de ahorro
(en millones de pesos)
Porcentaje del Total
Jubilaciones y pensiones contributivas6.858.981,8226%
Inversión real directa (obra pública)3.916.533,2315%
Subsidios a la Energía3.027.666,2011%
Salarios2.167.881,088%
Programas sociales2.143.841,858%
Transferencias de capital a provincias2.035.946,738%
Transferencias corrientes a provincias1.775.403,417%
Bienes y servicios970.645,184%
Otros gastos corrientes951.949,744%
Transferencias a universidades746.585,893%
Asignaciones familiares y pensiones no contributivas577.275,692%
Subsidios al Transporte610.347,912%
Asignaciones familiares por hijo458.212,932%
Subsidios a otras funciones92.530,180%
Total del recorte26.333.801,84100%
Fuente: elaboración propia con datos de IARAF